Los obispos de EEUU buscan el 'perdón' en su encuentro anual
Source: http://www.elmundo.es/elmundo/2002/06/13/sociedad/1023947196.html
No va a ser un encuentro especialmente conciliador. Encerrados en un lujoso hotel de Dallas, asediados por víctimas de pederastia, monjas feministas, curas casados, militantes ultraortodoxos... los 288 obispos y cardenales estadounidenses afrontan todo un calvario en su reunión anual
No va a ser un encuentro especialmente conciliador. Encerrados en un lujoso hotel de Dallas, asediados por víctimas de pederastia, monjas feministas, curas casados, militantes ultraortodoxos... los 288 obispos y cardenales estadounidenses afrontan todo un calvario en su reunión anual
adam on jueves 13 junio 2002 - 08:13:27
El cardenal de Los Ángeles comprobará las huellas dactilares y los antecedentes de sus curas
Source: http://www.laicismo.org/antiguo/PHP/p_documento.php?pagina=88&id=1475
El documento es la primera iniciativa de la empresa de relaciones públicas que ha contratado la archidiócesis para hacer frente al escándalo
El cardenal de Los Ángeles, Roger Mahony, ha escrito una carta abierta a la opinión pública en la que explica las medidas que va a adoptar para evitar nuevos casos de pederastia. Entre ellas, comprobar las huellas y los antecedentes criminales de los curas que quieran integrarse en la archidiócesis.
La misiva es la primera iniciativa de la empresa de relaciones públicas Sitrick, que la archidiócesis, la mayor de Estados Unidos, ha contratado para abordar el delicado tema de la pedofilia.
"Los abusos sexuales a menores son una gran preversión, un pecado y un crimen, les aseguro sin lugar a dudas que no serán tolerados", afirma el cardenal en la carta, que será publicada mañana en los diarios 'Los Angeles Times', 'Daily News' y el diario en español 'La Opinión'.
Mahony, que reconoció haber encubierto en el pasado casos de abusos sexuales en su archidiócesis, dice ahora que no puede "pasar más de unos pocos minutos cada día sin pensar en el gran daño que un pequeño número de sacerdotes ha hecho a tanta gente".
Más de 30 sacerdotes y ex sacerdores católicos están siendo investigados por las autoridades de Los Angeles y los condados aledaños tras haber sido acusados de violación de menores.
Mahony también pretende convencer a la opinión pública de que hace todo lo posible para prevenir nuevos casos de abusos a menores. "El cardenal es consciente de la importancia de hacer llegar este mensaje a la gente", afirmó el portavoz de la archidiócesis, Tod Tamberg.
Conferencia de obispos en Dallas
El cardenal indicó que, además, pedirá a los obispos estadounidenses que adopten una política nacional de 'tolerancia cero' durante una conferencia que se celebrará la próxima semana en Dallas (Tejas). De acuerdo con esa política, ninguna persona, religiosa o laica, que haya abusado sexualmente de un menor podrá trabajar para la Iglesia católica de Estados Unidos.
El cardenal explicó que la archidiócesis contactará inmediatamente con las autoridades civiles cuando existan acusaciones de violación de menores. "Si la denuncia se revela verdadera, no devolveré a ese sacerdote a ningún ministerio activo u oficina pastoral", añadió Mahony, quien en el pasado se limitó a trasladar de parroquia a los curas acusados de pedofilia.
Por su parte, David Clohessy, director de la Red de Supervivientes de las Personas Víctimas de Abusos de Sacerdotes (SNAP, por sus siglas en inglés), advirtió de que "incluso si estas ideas son adoptadas en Dallas, nada las hace obligatorias para ningún obispo, diócesis u orden religiosa. Serán simplemente sugerencias, nada más"
El documento es la primera iniciativa de la empresa de relaciones públicas que ha contratado la archidiócesis para hacer frente al escándalo
El cardenal de Los Ángeles, Roger Mahony, ha escrito una carta abierta a la opinión pública en la que explica las medidas que va a adoptar para evitar nuevos casos de pederastia. Entre ellas, comprobar las huellas y los antecedentes criminales de los curas que quieran integrarse en la archidiócesis.
La misiva es la primera iniciativa de la empresa de relaciones públicas Sitrick, que la archidiócesis, la mayor de Estados Unidos, ha contratado para abordar el delicado tema de la pedofilia.
"Los abusos sexuales a menores son una gran preversión, un pecado y un crimen, les aseguro sin lugar a dudas que no serán tolerados", afirma el cardenal en la carta, que será publicada mañana en los diarios 'Los Angeles Times', 'Daily News' y el diario en español 'La Opinión'.
Mahony, que reconoció haber encubierto en el pasado casos de abusos sexuales en su archidiócesis, dice ahora que no puede "pasar más de unos pocos minutos cada día sin pensar en el gran daño que un pequeño número de sacerdotes ha hecho a tanta gente".
Más de 30 sacerdotes y ex sacerdores católicos están siendo investigados por las autoridades de Los Angeles y los condados aledaños tras haber sido acusados de violación de menores.
Mahony también pretende convencer a la opinión pública de que hace todo lo posible para prevenir nuevos casos de abusos a menores. "El cardenal es consciente de la importancia de hacer llegar este mensaje a la gente", afirmó el portavoz de la archidiócesis, Tod Tamberg.
Conferencia de obispos en Dallas
El cardenal indicó que, además, pedirá a los obispos estadounidenses que adopten una política nacional de 'tolerancia cero' durante una conferencia que se celebrará la próxima semana en Dallas (Tejas). De acuerdo con esa política, ninguna persona, religiosa o laica, que haya abusado sexualmente de un menor podrá trabajar para la Iglesia católica de Estados Unidos.
El cardenal explicó que la archidiócesis contactará inmediatamente con las autoridades civiles cuando existan acusaciones de violación de menores. "Si la denuncia se revela verdadera, no devolveré a ese sacerdote a ningún ministerio activo u oficina pastoral", añadió Mahony, quien en el pasado se limitó a trasladar de parroquia a los curas acusados de pedofilia.
Por su parte, David Clohessy, director de la Red de Supervivientes de las Personas Víctimas de Abusos de Sacerdotes (SNAP, por sus siglas en inglés), advirtió de que "incluso si estas ideas son adoptadas en Dallas, nada las hace obligatorias para ningún obispo, diócesis u orden religiosa. Serán simplemente sugerencias, nada más"
adam on miércoles 05 junio 2002 - 08:15:21
Arrestan a sacerdote brasileño acusado de pedofilia
Source: http://www.invertia.com/noticias/articulo-final.asp?idNoticia=601298
SAO PAULO, mayo 4 (Reuters) - La policía arrestó al párroco Paulo Sergio Maya Barbosa mientras tenía relaciones sexuales con un menor de 15 años en Piracicaba, cerca de Sao Paulo, informó el sábado la policía brasileña.
Barbosa fue arrestado en las últimas horas del viernes, cuando se encontraba con el adolescente dentro de un automóvil de propiedad de la Arquidiócesis.
El muchacho fue entregado a su padre y Barbosa fue llevado a la cercana cárcel de San Pedro, donde permanecerá hasta que sea presentado ante un juez, dijo una portavoz de la la policía.
"Dentro del automóvil se halló asimismo una carpeta con 45 fotos Kodak de un niño y 25 negativos, algunos condones y una copia de la revista Veja", agregó la fuente. El reportaje central de la revista era sobre la pedofilia dentro de la Iglesia.
La Congregación Nacional de Obispos dijo que no hace comentarios sobre casos relacionados con sus representantes, pero indicó que la Iglesia Católica no tolera la pedofilia, que a los arrestados se les da la oportunidad de reformarse con ayuda psicológica y si esto no resulta, se les expulsa.
Este el el más reciente caso de una ola de escándalos de abuso sexual que han plagado a la Iglesia recientemente, desde todos los rincones de la tierra, incluso más notablemente Estados Unidos y Europa, pero también en Africa, México, Brasil y hasta en la Polonia nativa del Papa Juan Pablo II. ((Reese Ewing, Redacción de Sao Paulo - 5511 5644 7721, reese.ewing@reuters.com))
SAO PAULO, mayo 4 (Reuters) - La policía arrestó al párroco Paulo Sergio Maya Barbosa mientras tenía relaciones sexuales con un menor de 15 años en Piracicaba, cerca de Sao Paulo, informó el sábado la policía brasileña.
Barbosa fue arrestado en las últimas horas del viernes, cuando se encontraba con el adolescente dentro de un automóvil de propiedad de la Arquidiócesis.
El muchacho fue entregado a su padre y Barbosa fue llevado a la cercana cárcel de San Pedro, donde permanecerá hasta que sea presentado ante un juez, dijo una portavoz de la la policía.
"Dentro del automóvil se halló asimismo una carpeta con 45 fotos Kodak de un niño y 25 negativos, algunos condones y una copia de la revista Veja", agregó la fuente. El reportaje central de la revista era sobre la pedofilia dentro de la Iglesia.
La Congregación Nacional de Obispos dijo que no hace comentarios sobre casos relacionados con sus representantes, pero indicó que la Iglesia Católica no tolera la pedofilia, que a los arrestados se les da la oportunidad de reformarse con ayuda psicológica y si esto no resulta, se les expulsa.
Este el el más reciente caso de una ola de escándalos de abuso sexual que han plagado a la Iglesia recientemente, desde todos los rincones de la tierra, incluso más notablemente Estados Unidos y Europa, pero también en Africa, México, Brasil y hasta en la Polonia nativa del Papa Juan Pablo II. ((Reese Ewing, Redacción de Sao Paulo - 5511 5644 7721, reese.ewing@reuters.com))
adam on sábado 04 mayo 2002 - 08:16:39
Reconocen pedofilia en curas mexicanos
Source: http://www.terra.com.mx/noticias/articulo/89993/Reconocen+pedofilia+en+curas+mexicanos.htm
Cd. de México.- El escándalo de la Iglesia de Estados Unidos no tarda en tocar México: aquí también hay casos de curas violadores de menores que han sido reubicados por sus superiores a otras parroquias para evitar el escándalo, dijo el sacerdote Alberto Athié, asesor del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) y ex secretario ejecutivo de las Comisiones Episcopales de Pastoral Social y de la Paz en Chiapas.
"Sabemos que hay este tipo de conductas en sacerdotes y una tendencia de parte de la institución de proteger al sacerdote y de salvaguardar la institución por encima de la dignidad de las personas afectadas", dijo el consultor de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos para asuntos de migrantes.
Los casos no son desconocidos al interior de la Iglesia, pues, según Athié, circulan "en el plano de las anécdotas" entre sacerdotes y religiosos.
"La Iglesia de EU no es la más nefasta, es la primera que afronta el problema. Si este asunto se llega a ampliar (...) vamos a entrar en una fase muy complicada como comunidad, pero necesaria para purificarnos, y va a tocar a México como va a tocar a todas las iglesias en términos de donde existan estos problemas. Creo que esta realidad se va a presentar en México tarde o temprano", dijo.
El ex secretario ejecutivo de Cáritas señaló que cuando se presentan quejas contra curas pedófilos, en la Iglesia de México se actúa de la misma manera que la de EU y de la mayor parte del mundo, "evitando el escándalo y la denuncia penal en contra del sacerdote, y reubicándolo en otro lugar".
Para Athié, el problema mayor no son las conductas sexuales de ciertos sacerdotes, sino el encubrimiento institucional como mecanismo de defensa.
"Hay una actitud estructural de la Iglesia de proteger al sacerdote y proteger a la institución por encima de la dignidad de los derechos humanos de las personas afectadas. Esa tendencia estructural no es exclusiva de los Estados Unidos, es una tendencia más generalizada y, por tanto, el problema no es sólo de conductas de individuos sino de conductas institucionalizadas", señaló.
Cd. de México.- El escándalo de la Iglesia de Estados Unidos no tarda en tocar México: aquí también hay casos de curas violadores de menores que han sido reubicados por sus superiores a otras parroquias para evitar el escándalo, dijo el sacerdote Alberto Athié, asesor del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam) y ex secretario ejecutivo de las Comisiones Episcopales de Pastoral Social y de la Paz en Chiapas.
"Sabemos que hay este tipo de conductas en sacerdotes y una tendencia de parte de la institución de proteger al sacerdote y de salvaguardar la institución por encima de la dignidad de las personas afectadas", dijo el consultor de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos para asuntos de migrantes.
Los casos no son desconocidos al interior de la Iglesia, pues, según Athié, circulan "en el plano de las anécdotas" entre sacerdotes y religiosos.
"La Iglesia de EU no es la más nefasta, es la primera que afronta el problema. Si este asunto se llega a ampliar (...) vamos a entrar en una fase muy complicada como comunidad, pero necesaria para purificarnos, y va a tocar a México como va a tocar a todas las iglesias en términos de donde existan estos problemas. Creo que esta realidad se va a presentar en México tarde o temprano", dijo.
El ex secretario ejecutivo de Cáritas señaló que cuando se presentan quejas contra curas pedófilos, en la Iglesia de México se actúa de la misma manera que la de EU y de la mayor parte del mundo, "evitando el escándalo y la denuncia penal en contra del sacerdote, y reubicándolo en otro lugar".
Para Athié, el problema mayor no son las conductas sexuales de ciertos sacerdotes, sino el encubrimiento institucional como mecanismo de defensa.
"Hay una actitud estructural de la Iglesia de proteger al sacerdote y proteger a la institución por encima de la dignidad de los derechos humanos de las personas afectadas. Esa tendencia estructural no es exclusiva de los Estados Unidos, es una tendencia más generalizada y, por tanto, el problema no es sólo de conductas de individuos sino de conductas institucionalizadas", señaló.
adam on domingo 07 abril 2002 - 08:18:24
Citan al Vaticano a juicio por encubrir a los curas pedófilos
Source: http://www.interbook.net/personal/angelberto/iglesiacatolica.htm
ROMA. El Vaticano ha sido denunciado y llamado a juicio en Florida y Oregón para responder a las acusaciones de conspiración y de encubrimiento. La defensa de varios ex seminaristas y estudiantes norteamericanos considera que la Santa Sede se ha interpuesto para proteger a los sacerdotes que ejercieron abusos sexuales y pedofilia.
Es la primera vez que el nombre del Vaticano aparece entremezclado en el escándalo de abusos a menores que sacude a la Iglesia norteamericana. Juan Pablo II no figura en la lista de los sospechosos llamados a declarar, pero la defensa de los ex seminaristas aspira a poner en evidencia a otros dignatarios de la Iglesia romana. «Todos los caminos llevan al Vaticano», señalaba el abogado Jeff Anderson en alusión a la presunta complicidad de la Santa Sede. «Es normal que sean convocados a juicio quienes representan a la jerarquía de la Iglesia católica. No hay otras razones políticas ni religiosas. Queremos simplemente justicia», añadía el abogado.
El hecho de que el Vaticano haya sido citado a juicio representa una novedad insólita, pero no es fácil que la defensa consiga finalmente el objetivo. Entre otros motivos porque la Santa Sede goza de inmunidad jurídica internacional.
El abogado Jeff Anderson acusa al Vaticano de haber trasladado a los sacerdotes acusados para sustraerlos de los procesos judiciales aprovechando el cambio de estado o de jurisdicción. «Es una forma de interponerse en la causa y de intentar evitar que el peso de la justicia caiga como merece sobre los responsables», señalaba Anderson en las puertas del tribunal de Sant Petersburg (Florida).
Traslado de sacerdotes
Las declaraciones vienen a cuento porque la diócesis de Boston, a través del cardenal Bernard Law, movió al padre John Geoghan de parroquia en parroquia y de estado en estado al conocerse que había abusado sexualmente de más de 130 menores, según las denuncias.
La misma estrategia sirvió para proteger al padre William Burke, acusado de pedofilia en el estado de Florida, pero trasladado al estado de Nueva Jersey cuando estaban a punto de arrestarlo. El abogado Jeff Anderson, por tanto, sostiene que la Iglesia y las instancias vaticanas intentaron eludir el asedio de los tribunales, «de modo que podrían haber incurrido en los delitos de conspiración y de encubrimiento», de acuerdo con las primeras denuncias.
La hipotética responsabilidad del Vaticano difícilmente va a cristalizar en un proceso o en una condena. Basta echar un vistazo al modo en que el cardenal Marcinkus, responsable de la red financiera de la Santa Sede en los años más turbios, eludió el banquillo gracias a la inmunidad jurídica y a los acuerdos de no ingerencia vigentes entre el Estado italiano y el Vaticano desde los tiempos de Mussolini.
ROMA. El Vaticano ha sido denunciado y llamado a juicio en Florida y Oregón para responder a las acusaciones de conspiración y de encubrimiento. La defensa de varios ex seminaristas y estudiantes norteamericanos considera que la Santa Sede se ha interpuesto para proteger a los sacerdotes que ejercieron abusos sexuales y pedofilia.
Es la primera vez que el nombre del Vaticano aparece entremezclado en el escándalo de abusos a menores que sacude a la Iglesia norteamericana. Juan Pablo II no figura en la lista de los sospechosos llamados a declarar, pero la defensa de los ex seminaristas aspira a poner en evidencia a otros dignatarios de la Iglesia romana. «Todos los caminos llevan al Vaticano», señalaba el abogado Jeff Anderson en alusión a la presunta complicidad de la Santa Sede. «Es normal que sean convocados a juicio quienes representan a la jerarquía de la Iglesia católica. No hay otras razones políticas ni religiosas. Queremos simplemente justicia», añadía el abogado.
El hecho de que el Vaticano haya sido citado a juicio representa una novedad insólita, pero no es fácil que la defensa consiga finalmente el objetivo. Entre otros motivos porque la Santa Sede goza de inmunidad jurídica internacional.
El abogado Jeff Anderson acusa al Vaticano de haber trasladado a los sacerdotes acusados para sustraerlos de los procesos judiciales aprovechando el cambio de estado o de jurisdicción. «Es una forma de interponerse en la causa y de intentar evitar que el peso de la justicia caiga como merece sobre los responsables», señalaba Anderson en las puertas del tribunal de Sant Petersburg (Florida).
Traslado de sacerdotes
Las declaraciones vienen a cuento porque la diócesis de Boston, a través del cardenal Bernard Law, movió al padre John Geoghan de parroquia en parroquia y de estado en estado al conocerse que había abusado sexualmente de más de 130 menores, según las denuncias.
La misma estrategia sirvió para proteger al padre William Burke, acusado de pedofilia en el estado de Florida, pero trasladado al estado de Nueva Jersey cuando estaban a punto de arrestarlo. El abogado Jeff Anderson, por tanto, sostiene que la Iglesia y las instancias vaticanas intentaron eludir el asedio de los tribunales, «de modo que podrían haber incurrido en los delitos de conspiración y de encubrimiento», de acuerdo con las primeras denuncias.
La hipotética responsabilidad del Vaticano difícilmente va a cristalizar en un proceso o en una condena. Basta echar un vistazo al modo en que el cardenal Marcinkus, responsable de la red financiera de la Santa Sede en los años más turbios, eludió el banquillo gracias a la inmunidad jurídica y a los acuerdos de no ingerencia vigentes entre el Estado italiano y el Vaticano desde los tiempos de Mussolini.
adam on viernes 05 abril 2002 - 09:22:25
Detienen a un cura brasileño sorprendido en pleno acto sexual con un adolescente en Sao Paulo
Source: http://www.elmundo.es/elmundo/2002/05/04/sociedad/1020529153.html
SAO PAULO.- Un sacerdote católico brasileño ha sido detenido por las autoridades tras haber sido sorprendido en plena relación sexual con un chico de 15 años en un automóvil propiedad de su diócesis, informaron fuentes policiales.
Las autoridades no identificaron al sacerdote ni a su acompañante pero informaron de que el automóvil pertenece a la Archidiócesis de Piracicaba, un pequeño municipio rural del interior del estado de Sao Paulo.
El cura y el joven fueron sorprendidos anoche por efectivos de la Policía Militar en el interior del coche, que había sido estacionado junto a un cañaveral situado a la vera de una poco transitada carretera.
Corrupción de menores
Según fuentes policiales, por el hecho de haber sido sorprendido en pleno acto, el sacerdote, de 40 años, ha quedado detenido y será acusado formalmente de corrupción de menores.
Las mismas fuentes indicaron que en el interior del vehículo fue hallado un paquete que contenía fotos pornográficas y una revista que, en su portada, anunciaba un artículo sobre los escándalos sexuales surgidos en el seno de la Iglesia Católica en las últimas semanas.
La policía indicó además que el joven que acompañaba al sacerdote confesó que le había conocido hace apenas una semana y que mantenían relaciones sexuales "desde hace unos días".
Varios de los escándalos que han estremecido a la Iglesia en las últimas semanas han ocurrido en Brasil, considerado el país con más católicos en el mundo.
Hace diez días, los escándalos sexuales en la Iglesia Católica cobraron fuerza con la condena pública del papa Juan Pablo II a los abusos descubiertos en diversas parroquias y seminarios de Estados Unidos.
SAO PAULO.- Un sacerdote católico brasileño ha sido detenido por las autoridades tras haber sido sorprendido en plena relación sexual con un chico de 15 años en un automóvil propiedad de su diócesis, informaron fuentes policiales.
Las autoridades no identificaron al sacerdote ni a su acompañante pero informaron de que el automóvil pertenece a la Archidiócesis de Piracicaba, un pequeño municipio rural del interior del estado de Sao Paulo.
El cura y el joven fueron sorprendidos anoche por efectivos de la Policía Militar en el interior del coche, que había sido estacionado junto a un cañaveral situado a la vera de una poco transitada carretera.
Corrupción de menores
Según fuentes policiales, por el hecho de haber sido sorprendido en pleno acto, el sacerdote, de 40 años, ha quedado detenido y será acusado formalmente de corrupción de menores.
Las mismas fuentes indicaron que en el interior del vehículo fue hallado un paquete que contenía fotos pornográficas y una revista que, en su portada, anunciaba un artículo sobre los escándalos sexuales surgidos en el seno de la Iglesia Católica en las últimas semanas.
La policía indicó además que el joven que acompañaba al sacerdote confesó que le había conocido hace apenas una semana y que mantenían relaciones sexuales "desde hace unos días".
Varios de los escándalos que han estremecido a la Iglesia en las últimas semanas han ocurrido en Brasil, considerado el país con más católicos en el mundo.
Hace diez días, los escándalos sexuales en la Iglesia Católica cobraron fuerza con la condena pública del papa Juan Pablo II a los abusos descubiertos en diversas parroquias y seminarios de Estados Unidos.
adam on viernes 05 abril 2002 - 09:20:14
EL DIABLO LLEVABA SOTANA
Source: http://www.elmundo.es/cronica/2002/332/1014630705.html
87 SACERDOTES de Boston figuraban en un listado interno de la Iglesia por su implicación en abusos a menores. El cardenal Law prefirió mantener el escándalo en secreto durante décadas e indemnizar a las familias «bajo cuerda». Ahora la Justicia norteamericana quiere juzgarlos y ya ha condenado a uno de los curas pederastas a 10 años de cárcel
BERTA GLEZ DE VEGA/Boston
Jesús, Evangelio según San Mateo: «Quien se atreva a molestar a los más pequeños, que se cuelgue una piedra al cuello y se arroje al fondo del mar». Si la Iglesia en Boston siguiera con precisión los mandatos de Jesucristo, en las gélidas aguas de Nueva Inglaterra habría hoy 87 curas acusados de haber abusado sexualmente de centenares de menores con la complicidad, en muchos casos, de sus superiores, que los iban moviendo de parroquia en parroquia, dejando que los niños se acercaran a ellos.
La liberal, ajardinada y acádemica Boston, nido de la aristocracia protestante, lleva más de un mes descubriendo detalles escabrosos de 40 años de abusos sexuales en algunas de las parroquias católicas más conocidas de la archidiócesis. El cardenal Bernard Law ha estado atrincherado en su magnífica residencia buscando consejo y, finalmente, dinero, pues centenares de víctimas quieren todavía que la Iglesia les compense por asaltos sexuales de curas en pasillos, sacristías y dormitorios.
En los primeros coches que cruzaron los cuidados jardines para asesorar al cardenal iban los responsables de las facultades de Medicina más prestigiosas. Había que explicarle a Su Excelencia en qué consistía la pedofilia y ayudarle a aprender a detectar los casos de sacerdotes pederastas. Frente a esos jardines, Steven Lynch, una víctima de uno de los curas, lloraba el domingo al detallar qué fue para él la pedofilia. Estaba arropado por un centenar de católicos. Pero el cardenal no les había invitado.
A pesar de las explicaciones médicas, en una reunión a puerta cerrada con todos los sacerdotes hace apenas una semana, Bernard Law trató de disculpar actitudes pasadas al contar que, hace 15 años, no se sabía muy bien en qué consistía la «enfermedad».Poco antes, el cardenal había dicho que no iba a tratar el «aspecto criminal» del asunto.
La Justicia se acaba de hacer cargo del asunto. En su poder tiene los nombres de 87 curas, catalogados por la Iglesia en sus archivos como sacerdotes con pasado de abusos sexuales a niños. En el caso de 70 de ellos, la archidiócesis había llegado a acuerdos sin decir una palabra a la Justicia. Ahora se espera que la investigación de la Fiscalía pueda elevar a más de 1.000 el número de víctimas.El detonante de la pesadilla ha sido el cura John J. Geoghan, al que le quedan 80 juicios pendientes por abusos sexuales y reclamaciones de 130 víctimas.
El doble rasero con que Justicia e Iglesia tratan la pedofilia quedó en evidencia el jueves, cuando se hizo pública la primera condena contra Geoghan: 10 años de cárcel y la recomendación de que, una vez fuera de prisión, se le vigile estrechamente.
«Tu sacerdocio ha sido muy efectivo, tristemente interrumpido por la enfermedad. Que Dios te bendiga, Jack». Con esta nota el cardenal daba por concluida la carrera eclesiástica de Geoghan en 1996, en un tono demasiado cariñoso para referirse a un cura que le había costado a la Iglesia 11,5 millones de euros (1.910 millones de pesetas) en indemnizaciones privadas a sus víctimas.En todos los comunicados internos que, durante décadas, se cruzaron sobre este cura, la Iglesia siempre se refirió a su «problema», su «enfermedad» y su condición de «oveja descarriada». Cuando la enfermedad arreciaba, le mandaban dos meses sabáticos a Roma o a que le examinara un médico general sin experiencia en tratar a pederastas.
«OVEJAS DESCARRIADAS»
Finalmente, sí aceptaron ingresarlo un tiempo en Canadá, en una institución de la Iglesia donde tratan a estas «ovejas descarriadas».Ahora, un juez le ordenó que ingresara en un hospital mental.
Geoghan tenía una estrategia. Se hacía amigo de madres con problemas económicos y familias extensas. Ofrecía su ayuda y se colaba en sus casas. Le encantaba duchar a los niños, rezar con ellos en la cama y llevarlos a tomar un helado. La merienda tenía un precio: a la vuelta, había que masturbar al reverendo. Según sus víctimas, siempre decía lo mismo: «Como cuentes esto nadie te va a creer».
En Jamaica Plain, una de las parroquias donde estuvo destinado, una familia, al descubrir que el amigable cura había abusado de los siete hermanos, se puso en contacto con la archiocésis.La primera reacción de la Iglesia fue pedirles que evitaran el escándalo, que eso era lo mejor para la protección de sus hijos.La contestación fue dura. La familia consideraba esos consejos un «insulto a su inteligencia». La carta que recibieron del cardenal Humberto Madeiros, predecesor de Bernard Law, les dejó estupefactos: «Al mismo tiempo invoco a la compasión de Dios y comparto esa compasión en el conocimiento de que Dios perdona los pecados».
Algunas familias de víctimas se han indignado al conocer la historia de los 87 curas. La Iglesia, al llegar a un acuerdo privado con ellos, prometió apartar de las parroquias a los abusadores. Ahora han sabido que no lo cumplió. El cardenal figura en 25 querellas como acusado por haber encubierto a los pedófilos y no haber hecho nada para evitar que siguieran delinquiendo.
La familia Fulchino firma una de ellas como acusación. En 1995, en las noticias, por primera vez, hablaban de las víctimas de Geoghan. «Mamá, yo soy una de ellas», dijo Chris. El joven, que tenía 13 años cuando Geoghan abusó de él, supo ese día que su padre, Thomas, había sido víctima del reverendo Porter, el cura pederasta más famoso en Boston hasta aquella fecha. A padre e hijo les unía ahora saberse víctimas de abusos sexuales de curas con 30 años de diferencia. Thomas sigue creyendo que la Iglesia hace una buena labor. Chris nunca volvió a pisar una parroquia: «En todas veo la cara de Geoghan».
100.000 VÍCTIMAS
Los Fulchino podrían unirse ahora a la Red de Supervivientes de Abusos Sexuales de Curas. Según David Clohessy, su responsable nacional, los académicos religiosos estiman que, de los 53.000 curas católicos de EEUU, entre el 2 y el 10% puede ser pedófilo.El número de víctimas se ha estimado en unas 100.000. La Red de Supervivientes tiene 3.400 miembros. En todo el país, hay 1.500 querellas contra curas católicos por abusos sexuales.
Uno de esos curas es Paul R. Shanley, muy conocido en los 70 en Boston como «el cura de la calle». El reverendo Shanley llevaba melenas y era el prototipo de cura progre. Guapo y carismático, en la intimidad era todo un avezado jugador del strip-poker, juego con el que pretendía relajar a sus jóvenes parroquianos.Le gustaba sembrar la polémica en la Iglesia, defendía abiertamente a los homosexuales y ayudaba a los drogadictos. En alguna ocasión, Shanley llegó a decir a los adolescentes que Dios le utilizaba para averiguar quién era homosexual. Por el momento, se han identificado 42 víctimas suyas.
En 1974, la madre de una de las víctimas le dio al cardenal Madeiros el diario de su hijo. En él relataba siete años de experiencias sexuales con Shanley. La Iglesia no hizo nada. Otra madre, amiga del cura, mandó a su hijo, que se había fugado de casa, a su parroquia. Hasta mediados de los 90, no denunció los abusos.La madre todavía tiene una copia de una oración que le dio el sacerdote: «Tú, que tenías como amigas a las prostitutas, que fuiste crucificado porque comiste y bebiste con pecadores (...) guarda a nuestros niños de los adultos depredadores».
Shanley tiene 70 años y vive en San Diego. Durante una época trabajó en Leo House, un albergue en Nueva York para curas, estudiantes y viajeros. Cuando se enteró la archidiócesis de Boston, según el Globe, le dijo que se fuera de allí si no quería perder el seguro médico. Pero la Iglesia tardó tres años en darse cuenta de que Shanley volvía a estar en contacto con chavales.
La Iglesia nunca comunicó a los superiores directos de Geoghan que el cura arrastraba un pasado de abusos a niños. Así, sin muchos problemas, el sacerdote se hacía cargo de los monaguillos y de los grupos de jóvenes de sus nuevos destinos. La archidiócesis tampoco comunicó a la familia más directa de Paul J. Mahan las quejas que había recibido en los 80 sobre los abusos sexuales del cura. En 1996, su hermana Joan le mandó a uno de sus hijos.Creía que su hermano sacerdote sería una buena influencia. No sabía que, en 1993, la archidiócesis había ordenado que recibiera tratamiento en la misma instalación canadiense que Geoghan. Los médicos certificaron que Mahan se sentía atraído por chicos adolescentes.A pesar de eso, la Iglesia le mandó a la parroquia del Sagrado Corazón en Cambridge. Documentos confidenciales hechos públicos por el Boston Globe demuestran que la Iglesia, además, sabía que Mahan era «intratable» y que era más que probable que de nuevo asaltara sexualmente a menores.
Sólo la denuncia de su hermana por haber abusado de su sobrino hizo reaccionar a la Iglesia, que en 1997 le apartó del sacerdocio.Ahora trabaja en una tienda de electrónica en Vermont. A su hermana le preocupa que nadie le vigile. Él mismo, en una nota en 1997, escribió: «Mi enfermedad es tan profunda que no creo que nadie pueda confiar en mí».
87 SACERDOTES de Boston figuraban en un listado interno de la Iglesia por su implicación en abusos a menores. El cardenal Law prefirió mantener el escándalo en secreto durante décadas e indemnizar a las familias «bajo cuerda». Ahora la Justicia norteamericana quiere juzgarlos y ya ha condenado a uno de los curas pederastas a 10 años de cárcel
BERTA GLEZ DE VEGA/Boston
Jesús, Evangelio según San Mateo: «Quien se atreva a molestar a los más pequeños, que se cuelgue una piedra al cuello y se arroje al fondo del mar». Si la Iglesia en Boston siguiera con precisión los mandatos de Jesucristo, en las gélidas aguas de Nueva Inglaterra habría hoy 87 curas acusados de haber abusado sexualmente de centenares de menores con la complicidad, en muchos casos, de sus superiores, que los iban moviendo de parroquia en parroquia, dejando que los niños se acercaran a ellos.
La liberal, ajardinada y acádemica Boston, nido de la aristocracia protestante, lleva más de un mes descubriendo detalles escabrosos de 40 años de abusos sexuales en algunas de las parroquias católicas más conocidas de la archidiócesis. El cardenal Bernard Law ha estado atrincherado en su magnífica residencia buscando consejo y, finalmente, dinero, pues centenares de víctimas quieren todavía que la Iglesia les compense por asaltos sexuales de curas en pasillos, sacristías y dormitorios.
En los primeros coches que cruzaron los cuidados jardines para asesorar al cardenal iban los responsables de las facultades de Medicina más prestigiosas. Había que explicarle a Su Excelencia en qué consistía la pedofilia y ayudarle a aprender a detectar los casos de sacerdotes pederastas. Frente a esos jardines, Steven Lynch, una víctima de uno de los curas, lloraba el domingo al detallar qué fue para él la pedofilia. Estaba arropado por un centenar de católicos. Pero el cardenal no les había invitado.
A pesar de las explicaciones médicas, en una reunión a puerta cerrada con todos los sacerdotes hace apenas una semana, Bernard Law trató de disculpar actitudes pasadas al contar que, hace 15 años, no se sabía muy bien en qué consistía la «enfermedad».Poco antes, el cardenal había dicho que no iba a tratar el «aspecto criminal» del asunto.
La Justicia se acaba de hacer cargo del asunto. En su poder tiene los nombres de 87 curas, catalogados por la Iglesia en sus archivos como sacerdotes con pasado de abusos sexuales a niños. En el caso de 70 de ellos, la archidiócesis había llegado a acuerdos sin decir una palabra a la Justicia. Ahora se espera que la investigación de la Fiscalía pueda elevar a más de 1.000 el número de víctimas.El detonante de la pesadilla ha sido el cura John J. Geoghan, al que le quedan 80 juicios pendientes por abusos sexuales y reclamaciones de 130 víctimas.
El doble rasero con que Justicia e Iglesia tratan la pedofilia quedó en evidencia el jueves, cuando se hizo pública la primera condena contra Geoghan: 10 años de cárcel y la recomendación de que, una vez fuera de prisión, se le vigile estrechamente.
«Tu sacerdocio ha sido muy efectivo, tristemente interrumpido por la enfermedad. Que Dios te bendiga, Jack». Con esta nota el cardenal daba por concluida la carrera eclesiástica de Geoghan en 1996, en un tono demasiado cariñoso para referirse a un cura que le había costado a la Iglesia 11,5 millones de euros (1.910 millones de pesetas) en indemnizaciones privadas a sus víctimas.En todos los comunicados internos que, durante décadas, se cruzaron sobre este cura, la Iglesia siempre se refirió a su «problema», su «enfermedad» y su condición de «oveja descarriada». Cuando la enfermedad arreciaba, le mandaban dos meses sabáticos a Roma o a que le examinara un médico general sin experiencia en tratar a pederastas.
«OVEJAS DESCARRIADAS»
Finalmente, sí aceptaron ingresarlo un tiempo en Canadá, en una institución de la Iglesia donde tratan a estas «ovejas descarriadas».Ahora, un juez le ordenó que ingresara en un hospital mental.
Geoghan tenía una estrategia. Se hacía amigo de madres con problemas económicos y familias extensas. Ofrecía su ayuda y se colaba en sus casas. Le encantaba duchar a los niños, rezar con ellos en la cama y llevarlos a tomar un helado. La merienda tenía un precio: a la vuelta, había que masturbar al reverendo. Según sus víctimas, siempre decía lo mismo: «Como cuentes esto nadie te va a creer».
En Jamaica Plain, una de las parroquias donde estuvo destinado, una familia, al descubrir que el amigable cura había abusado de los siete hermanos, se puso en contacto con la archiocésis.La primera reacción de la Iglesia fue pedirles que evitaran el escándalo, que eso era lo mejor para la protección de sus hijos.La contestación fue dura. La familia consideraba esos consejos un «insulto a su inteligencia». La carta que recibieron del cardenal Humberto Madeiros, predecesor de Bernard Law, les dejó estupefactos: «Al mismo tiempo invoco a la compasión de Dios y comparto esa compasión en el conocimiento de que Dios perdona los pecados».
Algunas familias de víctimas se han indignado al conocer la historia de los 87 curas. La Iglesia, al llegar a un acuerdo privado con ellos, prometió apartar de las parroquias a los abusadores. Ahora han sabido que no lo cumplió. El cardenal figura en 25 querellas como acusado por haber encubierto a los pedófilos y no haber hecho nada para evitar que siguieran delinquiendo.
La familia Fulchino firma una de ellas como acusación. En 1995, en las noticias, por primera vez, hablaban de las víctimas de Geoghan. «Mamá, yo soy una de ellas», dijo Chris. El joven, que tenía 13 años cuando Geoghan abusó de él, supo ese día que su padre, Thomas, había sido víctima del reverendo Porter, el cura pederasta más famoso en Boston hasta aquella fecha. A padre e hijo les unía ahora saberse víctimas de abusos sexuales de curas con 30 años de diferencia. Thomas sigue creyendo que la Iglesia hace una buena labor. Chris nunca volvió a pisar una parroquia: «En todas veo la cara de Geoghan».
100.000 VÍCTIMAS
Los Fulchino podrían unirse ahora a la Red de Supervivientes de Abusos Sexuales de Curas. Según David Clohessy, su responsable nacional, los académicos religiosos estiman que, de los 53.000 curas católicos de EEUU, entre el 2 y el 10% puede ser pedófilo.El número de víctimas se ha estimado en unas 100.000. La Red de Supervivientes tiene 3.400 miembros. En todo el país, hay 1.500 querellas contra curas católicos por abusos sexuales.
Uno de esos curas es Paul R. Shanley, muy conocido en los 70 en Boston como «el cura de la calle». El reverendo Shanley llevaba melenas y era el prototipo de cura progre. Guapo y carismático, en la intimidad era todo un avezado jugador del strip-poker, juego con el que pretendía relajar a sus jóvenes parroquianos.Le gustaba sembrar la polémica en la Iglesia, defendía abiertamente a los homosexuales y ayudaba a los drogadictos. En alguna ocasión, Shanley llegó a decir a los adolescentes que Dios le utilizaba para averiguar quién era homosexual. Por el momento, se han identificado 42 víctimas suyas.
En 1974, la madre de una de las víctimas le dio al cardenal Madeiros el diario de su hijo. En él relataba siete años de experiencias sexuales con Shanley. La Iglesia no hizo nada. Otra madre, amiga del cura, mandó a su hijo, que se había fugado de casa, a su parroquia. Hasta mediados de los 90, no denunció los abusos.La madre todavía tiene una copia de una oración que le dio el sacerdote: «Tú, que tenías como amigas a las prostitutas, que fuiste crucificado porque comiste y bebiste con pecadores (...) guarda a nuestros niños de los adultos depredadores».
Shanley tiene 70 años y vive en San Diego. Durante una época trabajó en Leo House, un albergue en Nueva York para curas, estudiantes y viajeros. Cuando se enteró la archidiócesis de Boston, según el Globe, le dijo que se fuera de allí si no quería perder el seguro médico. Pero la Iglesia tardó tres años en darse cuenta de que Shanley volvía a estar en contacto con chavales.
La Iglesia nunca comunicó a los superiores directos de Geoghan que el cura arrastraba un pasado de abusos a niños. Así, sin muchos problemas, el sacerdote se hacía cargo de los monaguillos y de los grupos de jóvenes de sus nuevos destinos. La archidiócesis tampoco comunicó a la familia más directa de Paul J. Mahan las quejas que había recibido en los 80 sobre los abusos sexuales del cura. En 1996, su hermana Joan le mandó a uno de sus hijos.Creía que su hermano sacerdote sería una buena influencia. No sabía que, en 1993, la archidiócesis había ordenado que recibiera tratamiento en la misma instalación canadiense que Geoghan. Los médicos certificaron que Mahan se sentía atraído por chicos adolescentes.A pesar de eso, la Iglesia le mandó a la parroquia del Sagrado Corazón en Cambridge. Documentos confidenciales hechos públicos por el Boston Globe demuestran que la Iglesia, además, sabía que Mahan era «intratable» y que era más que probable que de nuevo asaltara sexualmente a menores.
Sólo la denuncia de su hermana por haber abusado de su sobrino hizo reaccionar a la Iglesia, que en 1997 le apartó del sacerdocio.Ahora trabaja en una tienda de electrónica en Vermont. A su hermana le preocupa que nadie le vigile. Él mismo, en una nota en 1997, escribió: «Mi enfermedad es tan profunda que no creo que nadie pueda confiar en mí».
adam on domingo 24 febrero 2002 - 09:24:29
Detenido un sacerdote en Cáceres por un presunto delito de pornografía infantil
Source: http://www.elpais.com/articulo/espana/Detenido/sacerdote/Caceres/presunto/delito/pornografia/infantil/elpeputec/20020213elpepunac_2/Tes
El párroco de la localidad cacereña de Casares de las Hurdes, I.L.O. de 29 años, ha sido detenido por agentes de la Brigada de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional procedentes de Madrid como presunto autor de un delito de pornografía infantil a través de Internet, según han confirmado fuentes policiales y del Obispado de Coria-Cáceres.
La detención se efectuó el pasado jueves, fecha desde la que el sacerdote se encuentra ingresado en prisión preventiva en la cárcel de Cáceres, confirmó la Subdelegación del Gobierno, desde donde se aclaró que en la investigación y posterior detención no intervinieron las comisarías de Cáceres ni de Plasencia.
I.L.O. es natural de Valverde del Fresno y, según publica el rotativo regional El Periódico de Extremadura, supuestamente intercambiaba material sobre menores con contenido sexual a través de la red, aunque, al parecer, no se trata de imágenes de niños de la localidad, ya que, hasta el momento, no se han presentado denuncias de corrupción de menores. El material que presuntamente intercambiaba el sacerdote a través de Internet no sería propio, si bien aún no ha trascendido su procedencia exacta.
Esto ha sido confirmado hoy desde el Obispado de Coria-Cáceres que, en una nota explica que el detenido es acusado de "posesión e intercambio de imágenes relativas a la pornografía infantil obtenidas a través de la red de Internet".
Catequesis familiar
Vecinos de la población han explicado que el pasado domingo fue un sacerdote de la vecina población de Nuñomoral el que ofició la eucaristía en la Parroquia de Santísimo Sacramento y en el diario regional se recoge el testimonio de una mujer diciendo que el propio detenido se excusó antes de su detención ante los padres que acudían a catequesis familiar, por verse obligado a suspender las sesiones esta semana por problemas personales.
Mientras tanto, desde el Obispado de Coria-Cáceres confirman que el párroco ejercía el apostolado en el municipio cacereña, que tiene unos 750 habitantes y se encuentra en el noroeste extremeño, muy próximo a la provincia de Salamanca, desde hacía tres años y que, además de en Casares de las Hurdes, oficiaba misas en las alquerías de Huetre, Heras, Carabusino, Casarrubia y Robledo, así como en su localidad natal, Valverde del Fresno, aunque este último sólo en ocasiones especiales.
El sacerdote vivía con su madre en la casa parroquial, manteniendo ambos una buena relación con el resto de los vecinos del pueblo, explican fuentes municipales.
"Conducta ejemplar"
En una nota, el Obispado de Coria-Cáceres ha confirmado que al día siguiente de su detención recibió la visita del obispo Ciriaco Benavente. Asimismo, se destaca la "conducta ejemplar" que ha venido manteniendo el párroco detenido lo que, según aseguran, le ha valido para "gozar de la estima de cuantos le han conocido y tratado".
Además, en la nota se sostiene que se siente "profundamente arrepentido de estos hechos, de cuyo alcance delictivo confiesa que nunca tuvo conciencia".
El Obispado ha asegurado que "es el primero en lamentar esta situación", y ha manifestado abiertamente su "reprobación ante cualquier forma degradante de utilización de las personas y, en concreto, de la elaboración y tráfico de pornografía infantil".
Por su parte, el alcalde del municipio Olegario Rodríguez, ha asegurado que el sacerdote era considerado "un chico normal, agradable" y que ayuda a la comunidad.
El párroco de la localidad cacereña de Casares de las Hurdes, I.L.O. de 29 años, ha sido detenido por agentes de la Brigada de Delitos Tecnológicos de la Policía Nacional procedentes de Madrid como presunto autor de un delito de pornografía infantil a través de Internet, según han confirmado fuentes policiales y del Obispado de Coria-Cáceres.
La detención se efectuó el pasado jueves, fecha desde la que el sacerdote se encuentra ingresado en prisión preventiva en la cárcel de Cáceres, confirmó la Subdelegación del Gobierno, desde donde se aclaró que en la investigación y posterior detención no intervinieron las comisarías de Cáceres ni de Plasencia.
I.L.O. es natural de Valverde del Fresno y, según publica el rotativo regional El Periódico de Extremadura, supuestamente intercambiaba material sobre menores con contenido sexual a través de la red, aunque, al parecer, no se trata de imágenes de niños de la localidad, ya que, hasta el momento, no se han presentado denuncias de corrupción de menores. El material que presuntamente intercambiaba el sacerdote a través de Internet no sería propio, si bien aún no ha trascendido su procedencia exacta.
Esto ha sido confirmado hoy desde el Obispado de Coria-Cáceres que, en una nota explica que el detenido es acusado de "posesión e intercambio de imágenes relativas a la pornografía infantil obtenidas a través de la red de Internet".
Catequesis familiar
Vecinos de la población han explicado que el pasado domingo fue un sacerdote de la vecina población de Nuñomoral el que ofició la eucaristía en la Parroquia de Santísimo Sacramento y en el diario regional se recoge el testimonio de una mujer diciendo que el propio detenido se excusó antes de su detención ante los padres que acudían a catequesis familiar, por verse obligado a suspender las sesiones esta semana por problemas personales.
Mientras tanto, desde el Obispado de Coria-Cáceres confirman que el párroco ejercía el apostolado en el municipio cacereña, que tiene unos 750 habitantes y se encuentra en el noroeste extremeño, muy próximo a la provincia de Salamanca, desde hacía tres años y que, además de en Casares de las Hurdes, oficiaba misas en las alquerías de Huetre, Heras, Carabusino, Casarrubia y Robledo, así como en su localidad natal, Valverde del Fresno, aunque este último sólo en ocasiones especiales.
El sacerdote vivía con su madre en la casa parroquial, manteniendo ambos una buena relación con el resto de los vecinos del pueblo, explican fuentes municipales.
"Conducta ejemplar"
En una nota, el Obispado de Coria-Cáceres ha confirmado que al día siguiente de su detención recibió la visita del obispo Ciriaco Benavente. Asimismo, se destaca la "conducta ejemplar" que ha venido manteniendo el párroco detenido lo que, según aseguran, le ha valido para "gozar de la estima de cuantos le han conocido y tratado".
Además, en la nota se sostiene que se siente "profundamente arrepentido de estos hechos, de cuyo alcance delictivo confiesa que nunca tuvo conciencia".
El Obispado ha asegurado que "es el primero en lamentar esta situación", y ha manifestado abiertamente su "reprobación ante cualquier forma degradante de utilización de las personas y, en concreto, de la elaboración y tráfico de pornografía infantil".
Por su parte, el alcalde del municipio Olegario Rodríguez, ha asegurado que el sacerdote era considerado "un chico normal, agradable" y que ayuda a la comunidad.
adam on miércoles 13 febrero 2002 - 09:28:04
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